Una escapada a las montañas a una hora de Madrid

Este fin de semana hemos visitado la Reserva de la Biosfera de la Sierra del Rincón, una de las comarcas más olvidadas de la Comunidad de Madrid. La denominada "Sierra Pobre" conserva  en sus núcleos de población la arquitectura rural intacta al no haberse producido en ella un desarrollo urbanístico. Esta zona, que sufrió una enorme despoblación durante el éxodo rural de los años sesenta y setenta del siglo XX, está viviendo un renacimiento gracias al turismo rural.

Nuestra primera parada fue Montejo de La Sierra, concretamente la Panadería Nani. Está en la plaza del ayuntamiento y es famosa por el vuelo de "Cojonudos" (dulce típico de la zona) y botas de vino cortesía de la amable y peculiar dueña. Además se pueden comprar cantidad de bollos y panes recién hechos.

Con el estómago lleno nos dirigimos al Hayedo de Montejo, un bosque de hayas de 250 hectáreas declarado de Interés Nacional en 1974. En esta zona se da un microclima ya que se encuentra en la sombra y que el aire que no choca contra las montañas permite la captación de humedad. Para visitarlo es necesario solicitar un pase y recogerlo previamente en el pueblo. Se puede solicitar por teléfono o por internet.

Después llegamos al Cardoso de la Sierra, un pequeño pueblo de Guadalajara a 9 kilómetros del Hayedo donde nos alojaremos en la casa rural El sueño de los gatos y aparcaremos en coche hasta la vuelta. Este pequeño pueblo, que perteneció al Cardenal Cisneros, cuenta con una iglesia del siglo XI. Después de degustar un excelente menú casero en la taberna El Tino (C/ Tino s/n) nos decidimos a hacer senderismo. Tomamos la Senda de los antiguos Molinos de La Hiruela, que sigue el río Jarama, hasta llegar al molino de harina, donde cambiamos de dirección y subimos a La Hiruela. Tenéis toda la información sobre las sendas en este enlace. Nosostros la hicimos en sentido inverso.
 
El pequeño municipio de La Hiruela, al que llegamos tras unos 45 minutos de caminata desde El Cardoso, cuenta con un Museo Etnológico que reconstruye una vivienda rural del siglo XVII y una colección de más de 1000 piezas. Después de comer en el restaurante Ad Libutum regresamos a El Cardoso siguiendo la senda GR-88.

Al día siguiente subimos el Pico de Calahorra, 700 metros de ascenso y 1927 de altitud. Al regreso hacemos las mochilas y nos despedimos de El Cardoso de la Sierra. Hacemos una última parada en Montejo para comer en el Asador La Hontanilla: chuletón, unas migas de pastor riquísimas y croquetas caseras. Habíamos reservado con antelación (918697065) ya que debido a su proximidad con el Hayedo tiene gran afluencia los fines de semana. Cogemos de nuevo el coche y en menos de hora y media estamos de regreso en Madrid.

El pico de Calahorra, también conocido como Santuy